viernes, 17 de diciembre de 2010

Rankill: La Lista Negra 2010

Las empresas más molestas y perjudiciales para la salud del año
1- Garbarino
2- Edesur
3- Santander Río
4- Movistar/Personal/Claro
5- Clarín, Olé y TN.
6- Página 12 y 6, 7, 8.
7- Compumundo
8- Mac

Entidades abstractas y otros varios
1- Msn
2- Las palomas
3- San Pedro
4- 47 ramal camarones
5- La colonia de hormigas en el escritorio del trabajo

Las profesiones que tanto daño hicieron en el año y deberían extinguirse
1- Abogados
2- Contadores
3- Periodistas deportivos
4- Psiquiatras
5- Psicólogos
6- Periodistas en general

Razones sociales que más ensuciaron el año con su burocracia, clientelismo y demagogia
1- Inmobiliarias
2- Estudios contables
3- Bancos
4- Presidencia de La Nación


Individuos que por perseverancia ocuparon la lista negra en la mayor parte del año:
1- Mauricio Macri (Miembro Gold y fundador de la lista negra)
2- Pablo López
3- Coty Faetani
4- Silvia Martínez Cassina
5- Eduardo Feinmann
6- Estela de Carlotto, Hebe de Bonafini.

PD: Sepan disculpar los participantes que estuvieron en la lista negra el resto del año, pero el podio es sólo para unos pocos...

lunes, 6 de diciembre de 2010

La Cruz Del Sur

- Mi nombre es Jorge V. ¿En qué puedo ayudarle?
- Hola Jorge, mirá.. me acabo de quedar sin luz, es la segunda vez en la noche. No hay luz en toda la cuadra. Antes se cortó una hora aproximadamente.
- ¿Hace cuánto se quedó sin luz?
- Recién, dos minutos habrán pasado.
- ¿Tiene usted en su casa un disyuntor?
- Ehh.. No, tengo un estabilizador de tensión
- Ajá.. ¿Pudo usted comprobar que esté funcionando correctamente?
- Ehh.. Si, no soy técnico.. pero estaba andando bien.. ahora no hay luz, asi que no anda.
- ¿Pudo comprobar si los tapones se quemaron?
- Ehh.. Si, ya me fijé.. pero como te dije antes, toda la cuadra está sin luz. No es mío el problema solamente.
- ¿Pudo usted corroborar que toda la cuadra no tiene luz?
- Ehh.. Si, te lo dije antes.
- ¿Cómo pudo comprobarlo?
- Por telepatía. Disculpame.. ¿pero vos me estás gastando? Yo entiendo que vos tenés que preguntar porque hay gente que no tiene idea de lo que es un tapón. Pero te acabo de decir que tengo un estabilizador de tensión y que toda la manzana no tiene luz. ¿O te crees que soy tan boludo para no saber si la calle está más oscura porque es de noche nada más? ¿Querés que vaya a medirle los tapones a mis vecinos también? Porque por ahí me están haciendo una joda a mí y todos apagaron la luz a propósito, en tal caso, tus preguntas tendrían algo de sentido. Porque sino buscá el tapón y el tampón en la concha de tu hermana que debe estar sangrando todavía, pedazo de boludo. Dame el número de reclamo y después andate bien a la re...

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Carta abierta a la contradicción (Del ensayo del cretácico)

"No. Usted no es intelectual. Usted posee una serie de aprendizajes y saberes estructurados por una experiencia determinada. De modo tal, que es la relatividad de esas experiencias lo que le da identidad y diferencia en grupos homogéneos a esas prácticas, costumbres o vivencias. El intelectual desarrolla una forma crítica de pensar, o sea; es un rompepelotas per sé. Pero no porque le resulte poco funcional la luz amarilla del semáforo, porque los carritos del supermercado deberían de llevar alarmas de proximidad entre ellos o porque no tolera a los bipolares de las bicimotocicletas. No, nada de eso. Su pensar se desenvuelve de ese modo porque no es un receptáculo vacío, el cual se llena infinitamente por el conocimiento, sino que se pelea con los escritos, se pelea con los conceptos, no acepta que las oraciones en prosa deslumbrante le ocnubilen la vista y dejen soltar la dopamina para obturar el pensamiento crítico. No. Usted no es intelectual. Usted es inteligente. Transforma los problemas en soluciones prácticas sin tener que recurrir a un papel. Eso es la inteligencia. Lo que usted no puede discernir, es que hay otros saberes ajenos al suyo, que no debería de calificar como "degradados", sino como "otros". Es la alteridad del saber. Él sabe cosas que usted no sabe, pero usted cree que las cosas que usted sabe son más importantes o tienen más valor que las que él sabe, ya sea porque tiene el apoyo de la institución académica a su favor, el apoyo de una profesión o el apoyo de una jauría esquizofrénica y paranoica de peronistas sin Perón. La inteligencia tiene los saberes adecuados para obrar en el momento. El intelectual tiene todo el bagaje para construir mediante lápiz y papel. El inteligente es el que le ha construido ese lápiz y ha ejecutado a la perfección la matriz de la resolución temporal. Ahora bien, considerando que no hay una precisión matemática para medir los porcentajes de convivencia de ambas aptitudes en una persona, le pregunto: ¿realmente elegiría pasar su vida intentando ser intelectual?. El inteligente no necesita esta pregunta. Él la vive."

domingo, 7 de noviembre de 2010

Nerhoma VIII

"Hacia donde vayamos, todos llevamos una mochila con nuestros problemas. A veces su carga interior entra en un bolsillo, otras veces necesitamos un remolque para trasladarnos. A veces la abrimos y dejamos que el resto vea su interior, otras veces husmeamos en las ajenas. A veces la consideramos un objeto molesto e innecesario, otras veces nos mimetizamos tanto con el objeto que pasa a ser parte de nuestra identidad, como lo único que nos define. A veces se mofan de nuestra poca memoria y de que olvidamos las cosas; pero cúanto mejor sería olvidarnos la mochila en cualquier lugar..."

Reflexión

"¿Donde están los amigos con pileta cuando uno los necesita?"

domingo, 24 de octubre de 2010

El Universo de Don...

"Luego de poner en común determinadas hipótesis, refutar argumentos, relevar conceptos y discriminar los relatos adecuados; luego de cerrar un grupo de ideas bajo el universo simbólico adecuado y poner en correlato el contexto social y las acciones correspondientes al juicio ordinario; y luego de, sobre todo, analizar 4 horas de lujuria descontrolada, he llegado a la conclusión de que soy un sucio, asqueroso y degenerado de mierda."

Firmado Anónimo por Don Barrilete.
Sin Fecha.

jueves, 14 de octubre de 2010

El Berrinche Autóctono

En solidaridad con los desbarrancos diagnosticados como brotes clasistas con una escala de magnitud determinada, desde aquí se intenta rescatar a la pérdida del control infantil devenida en un crucigrama de especificidades técnicas que a nadie le interesa recordar; a lo sumo hacerse el interesado en saber, y luego empujar el colchón de cera de información nuevo a través del tímpano para no colapsar el disco interno (quiero dejar asentado que la selección de información no es inocente: "Escuché atentamente cada palabra que salía de tu boca, pero tu incapacidad de darle forma y sintaxis, simplemente me dispersaron hacia otros temas más interesantes, como aquel perro que intenta morderse la cola, o aquella disputa en la cola del banco, o el tipo que intenta mirar por encima del hombro a una nalga de circunferencias prominentes sin que su pareja lo note, o hacia aquel sujeto que intenta morder la cola del perro.. o de la muchacha"; lo cual conlleva a un rápido deterioro del almacén , tersgiversando la información en la transposición o en el recuerdo cercano). Finalizado el paréntesis de magnitud bíblica, volvemos al berrinche como explicación más exacta de un brote con límites definidos, pero que nunca deja de ser un papelón. Ahora bien, debemos conocer estos límites, saber cuándo comienza el berrinche y cuándo termina para transformarse en una revolución cíclica de ira retroalimentada, alimento para el conglomerado de carniceria de los abogados. Perdón, de los contadores. Perdón, de los psiquiatras. Perdón, de los abogados. No, perdón, estaba bien el anterior. A continuación, los límites aceptados convencionalmente y sus topes con la tolerancia:
· Podemos patalear. Pero no podemos insertarle una patada en la ingle al gerente del banco.
· Podemos gritar, balbuceando insultos por doquier. Pero no podemos emitir blasfemias, sobre todo si aún vivimos en el período de la inquisición o en un casa con integrantes del Opus Dei.
· Podemos estrellar objetos. Pero no podemos arrepentirnos luego de su destrucción. Su onda expansiva puede afectar a terceros que rápidamente aprovecharían la vulnerabilidad y el sentido de cordura propio para revolearnos sus objetos. Tampoco podemos estrellar objetos ajenos, exceptuando los celulares con la ganancia de sonido a punto de rebalsar que pueden hacer nuestro viaje en el transporte algo tedioso (Se recomienda llevar unos auriculares con formas de boleadoras. O, si es mejor, directamente unas boleadoras, es para enseñar la forma y figura correspondiente).
· Podemos tratar a las madres de todos como prostitutas, pero aparentemente no podemos tratarlas directamente como prostitutas. Es la máxima paradoja del berrinche.

viernes, 8 de octubre de 2010

Cíclica Reundancia Error

Esto acontece cuando contemplo el presente:

"Si mañana no me voy.. no sé que es hoy de mí"

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Nerhoma VII

Para seguir con la idea del texto anterior, la capacidad de comprensión alejada del iluminismo según Nerhoma. Va con dedicatoria.

"Perdemos la razón
cada vez que encontramos la comprensión
únicamente bajo el amparo y la adaptación de nuestra lógica racional"

viernes, 17 de septiembre de 2010

Elección racional y opción pasional

La alteridad que encarna este conflicto, nacido en el pleistoceno aproximadamente, parecería almacenar polos opuestos; y en gran parte lo hace, pero el problema que acarrea son las elecciones en los momentos propicios. No podemos justificar racionalmente una cruzada "cultural" en la inquisición, cuando unos siglos más tarde podríamos criticar su posición gastada por una óptica lógica-pasional. Los contextos racionales, al igual que los pasionales, pertenecen a una circunstancia determinada en un momento de circulación social que le es propio, arrebatar ello nos discrimina las condiciones de producción en análisis, su recepción y a nosotros como analistas. Por eso, deberíamos anclar el dilema principal del título en la elección de nuestra razón y las opciones que nos presta su validez emocional. Supongamos que tenemos la oportunidad/obligación/no pudimos zafar/deber de participar en un jurado; es muy probable que utilicemos la razón, en lugar de dejarnos arrastrar por el ímpetu pasional de la justicia social y terminar partiéndole la cabeza con una silla al acusado; lo cual nos vería rápidamente intercambiando posición hacia el banquillo. Las opciones se pueden tornar confusas en el fluido de lo masivo: la pasión en masa genera una gran bola de nieve que puede jalarnos, divagando en acciones racionales, hacia la vorágine del caos y la acefalía de control; y acá no estamos hablando de los dispositivos de control, sino de la propia responsabilidad como sujeto pensante de que algo no está funcionando como debería. Pero lo que el capitalismo ha logrado de una manera excepcional, es justamente esto que se pierde en las pulsiones de la multitud: ésta es una de las principales razones por las cuales no podemos abandonar el sistema, tendríamos que vivir en la barbarie. Podemos arrojar un par de cascotes, voltear algunos teléfonos públicos, insultar a un policía, tirar un caramelo por la mitad, extraer el pen drive en modo no seguro, pero la reincidencia nos colocaría automáticamente como piezas de tetris en la configuración del status quo. Para desbaratar esta sistematización podríamos promover un retorno al feudalismo, demoliendo los capitales de la élite para desayunar en una tabla rasante de comida nativa, pero para ello tendríamos que accionar una estrategia global capaz de destruir lo que hemos construido; sin embargo creo que allí no encontraríamos la solución. Convivir en la barbarie tampoco sería una guerra civil, ni siquiera una revolución; aquí se trata de organización. La organización de los tiempos actuales tiene propiedad intelecutal en la burguesía y los primeros designios de este sistema económico. ¿A qué tipo de cerro maquiavélico queremos dirigirnos con todo esto? No hay polos en esta disyuntiva racional-pasional. No podemos ser plenamente racionales porque seríamos adictivamente funcionales al sistema o tendríamos una ideología revolucionaria pero pasiva, lo cual nos convertiría en una simple impresora bolchevique del estado. No podemos ser plenamente pasionales porque seríamos perros en celo activados constantemente por la oferta de la moda y los medios masivos. Lo cierto es que tenemos porcentajes que se verían como la onda de sonido en la imagen, tomando y descartando los usos correspondientes a cada momento adecuado, lo cual nos dice mucho sobre nuestra balanza emotiva-racional. Lo que la modernidad ha plasmado es la aniquilación del libre albedrío de las pasiones; y al no contentarse con eso, nos ha heredado tradicionalmente el malestar que debería generarnos el uso de estas pasiones de manera inadecuada. El sistema ha hecho su trabajo, no hay forma de recuperar una conciencia colectiva colonizada, quizás tampoco es el deseo; pero tal vez es hora de abandonar la comodidad y pegar el salto evolutivo. Mientras este sistema se sigue retroalimentando con el individualismo innato, buscamos una solución fuera del aspecto racional sin involucrarnos en el caos de las pasiones. Para hallar una solución pasional debemos primero inmiscuirnos en las ideas, lo cual paradójicamente nos arrastra hacia lo racional. Y lo que se propone es basarnos en un pensamiento pirámidal, no por el orden de relevancia comunitaria, sino por la importancia desorientada para contrarrestar el paquete incorporado y naturalizado de la filosofía moderna del sustento monetario; sería fundamental primero alejarnos de las concepciones y metodologías más conservadoras de lo racional, y con esto me refiero a la práctica global de pensamiento contemporáneo. Un detalle puede arruinarnos un día, pero pareciera que un detalle no está inculcado como para alegrarnos el día; porque estamos acostumbrados a que debemos esperar por grandes detalles para alcanzar la felicidad o muchos detalles menores para no agachar la cabeza y oprimir el pecho. Este es el sentido piramidal interno. Y más allá de ser una propuesta individualista, lo es simplemente para compensar el ego que esto acarrea; dejando denotado que bastardeo la concepción del líder actual por sus posibilidades limitadas en base al histrionismo y sus camuflajes demagógicos. Lo primero que me da la pauta para saber que no estoy en un laberinto, es que ya he elegido las cosas por las cuales volvería a vivir esta vida si existiera esa posibilidad; más allá de las desgracias vividas y los detrimentos del mundo. Es una elección racional por las opciones pasionales.

sábado, 4 de septiembre de 2010

Nerhoma VI

"El que tiene mala memoria y se olvida las cosas,
es un pelotudo básico.

El que se jacta de su buena memoria y se olvida las cosas,
es un pelotudo completo.

Al que no le falla la memoria y se olvida las cosas,
básicamente se está haciendo el pelotudo."

viernes, 3 de septiembre de 2010

Nerhoma V

"No entiendo la teoría de la predestinación.
Se sabe que lo que uno realize está diagramado de antemano porque
¿ya sucedió y lo estamos repitiendo?
¿O porque alguien hizo un guión de lo que iba a suceder?
¿O alguien hizo simplemente los lineamientos generales y podemos improvisar?
De todos modos no me gusta esta obra,
tengo ganas de cambiar al director y patear el tablero."

viernes, 27 de agosto de 2010

Los Usos Capitales


El Plusvalor. Aquel enemigo de la fuente de trabajo y el fiel aliado del capital. Es letal e invisible, como los conceptos de Adam Smith; pero tiene un punto débil: los usos consuetudinarios. No hay forma de reprimir una costumbre laboral para un profesional que conoce cada detalle de su oficio y sabe cómo vengarse del Plusvalor para recuperar algo de lo que le es arrebatado. Pero éste profesional, a su vez, debe operar bajo la metáfora de Smith en forma literal: debe ser invisible. Su uso consuetudinario debe ser invisible para los ojos del empleador, aunque éste último esté enterado en las formas más simples; hay que ocultar los modos y desaparecer las formas complejas de venganza. Para saber si usted está en una posición estable dentro de los usos, le proponemos que responda el siguiente test:

1 - Llega tarde al trabajo, por lo cual decide:
a · Disculparse rápidamente ante sus jefes y les pide que si es necesario le reduzcan el sueldo acorde a la demora.
b · Se disculpa ante sus jefes, esconde el celular y comenta que se lo robaron en el tren o colectivo. Mientras se queja del servicio de transporte público y lo mal que está la sociedad.
c · Se disculpa ante sus jefes y les dice que Roberto Jacineta (colega laboral) le dijo ayer antes de irse que hoy entraban media hora más tarde por una refacción en el lobby.
d · Se disculpa ante sus jefes y les comenta que no recordaba la dirección del trabajo y se perdió en el camino.
e · Le pega a sus jefes. No se disculpa.

2 - Usted tiene un deadline para las 17 hs del viernes, por lo tanto:
a · Se queda a trabajar el jueves a la noche.
b · Se queda a trabajar el jueves a la noche, mientras aprovecha para imprimir un par de laburos personales, cocina un omelette en el escritorio del colega más chupamedias y camina desnudo por la oficina.
c · Delega el trabajo a Roberto Jacineta.
d · No sabe lo que es un Deadline.
e · Se queda el jueves a la noche para hackear el sistema, robarse unos aparatos e imprimir un afiche que diga "El Deadline está en el inodoro".

3 - Quedan 20 minutos para finalizar la hora del almuerzo, varios colegas se juntan para jugar a la pelota en el patio donde se juega a la pelota, usted:
a · Prefiere volver a su oficina y adelantar trabajo.
b · Realiza un poco de actividad trotando un poco con los colegas, pero sin exceso para evitar el sudor cuando retome el trabajo.
c · Pincha la pelota y recomienda a los jefes que el horario de almuerzo sea de 40 minutos. Denuncia que Roberto Jacineta trae una pelota todos los días.
d · Cuelga la pelota.
e · Juega a la pelota y en un desliz de habilidad entra a la oficina con la pelota derribando obstáculos y poniendo como meta la oficina del jefe. Golazo al vidrio.

4 - Se corta la luz en el trabajo, usted:
a · Se desespera por el trabajo que se va a acumular.
b · Aprovecha para dialogar con los colegas y conocer a otros.
c · Se toma una siesta y no se despierta hasta que vuelve la luz, amenazando a los colegas que no perturben su sueño y acusando a Roberto Jacineta de ser el principal iniciador de bromas.
d · Se queda dormido en el escritorio del jefe con los pies descalzos arriba de su escritorio hasta que se cumpla el horario laboral. Sin importar si ha vuelto la luz.
e · Usted ha provocado el corte de luz.

Mayoría de respuestas a:
· Usted vive por el sistema. No podría salir de él. No comprende otro funcionamiento de la sociedad. Usted está siendo extremadamente explotado por el plusvalor, pero no conoce otro funcionamiento de la economía por fuera de él. O no le queda otra opción y no tiene carácter.
Mayoría de respuestas b:
· Usted comprende el sistema, sabe cómo jugar con él y sacarle su provecho. Está en el punto gris, no sabe si quiere someterse a el sistema a su conveniencia o emprender su propia empresa.
Mayoría de respuestas c:
· Usted es el máximo exponente del "garca" capitalista. No conoce otra vida fuera del sistema. Vive para garcar a otros mientras es el lamebotas de cualquier autoridad. Sube escalones mientras a más gente pisa.
Mayoría de respuestas d:
· Usted debería estar fuera del sistema. Está a punto de ser devorado. Aproveche para irse ahora a una laguna a fumar una pipa y dialogar con el Buda antes que los ácidos del sistema capitalista empiezen a digerirlo.
Mayoría de respuestas e:
· Hay dos opciones: o usted es un anarquista infiltrado en las capas económicas capitalistas para derrocarlas. O usted es Roberto Jacineta.

martes, 24 de agosto de 2010

Nerhoma IV

"Somos un gran rebaño acostumbrado a oir y ver.
Pero muy poco acostumbrado a
escuchar y mirar."


Una vieja de Nerhoma que tuvo una dedicatoria hace un año aproximadamente.

miércoles, 18 de agosto de 2010

El Narco Legal


Dentro del oxímoron contemporáneo que titula este artículo, se halla la metáfora perfecta para evadir las maniobras ilícitas y ejecutarlas dentro del marco de la moral, la ética y la legalidad moderna. En algún punto rozando el paroxismo, se proponen una serie de irregularidades con soluciones parciales en forma de acumulación caótica:

· No podemos denunciar a una obra en construcción por alborotar nuestro amanecer en el período de vacaciones, pero podemos aprovechar la ocasión para comprar una batería con doble bombo y practicar junto con el bullicio de la obra camuflando los sonidos y evitando denuncias vecinales. No podemos denunciar al banco por estupidez burocrática que acarrea pérdida de tiempo, pero podemos justificar que estábamos comprendiendo una cita bíblica por primera vez cuando decidimos lanzar un piedrazo en el preciso momento que caminábamos por la vereda del banco (excusándonos que leímos "pescado" en lugar de "pecado"). No podemos tocar tópicos religiosos o políticos en una fecha de festividad alegre o cumpleaños, pero podemos embriagarnos con una damajuana bien tibia y cada vez que cometemos una estupidez, imprecamos "me cago en Dios" y nadie debería sentirse ofendido por la blasfemia. Podemos ir invitados a un cumpleaños sin saber el nombre del protagonista principal, pero para compensar debemos volver acompañados por partenaire de cuyo nombre nunca nos acordaremos. No podemos olvidar que es ilegal doblar a la izquierda en una avenida si no hay un semáforo que lo permita; pero podemos atravesar la intersección, clavar los frenos a los cinco metros, poner reversa hasta llegar a la esquina y retroceder doblando para quedar frente a la calle que necesitábamos tomar (es importante usar el espejo retrovisor para no atropellar un peatón que esté cruzando dentro del marco vial legal). No podemos manejar un vehículo si hemos bebido una copilla de más, pero si nos encontramos en esta situación y nos percatamos de que a veinte metros tenemos un control de alcoholemia: frenamos, pinchamos un neumático y pasamos por el control empujando el vehículo sin caernos ni vociferar groserías de ebrio. Puede haber amistad con roce sexual bajo circunstancias sobrias o de toxicidad, pero en el día posterior por lo menos una de las personas tiene que arrepentirse, para no sentar jurisprudencia. No podemos robarnos elementos del trabajo diariamente, pero podemos robarnos parte de él todos los días (por ejemplo: nos llevamos el microprocesador, la memoria y un disco hasta completar la pc. Nos llevamos las butacas, el arbol de levas y el radiador hasta completar el automóvil). No podemos cantar victoria antes de tiempo, pero podemos gastar al rival hasta que la competencia sea suspendida por abandono o riña. No podemos acabar con el capitalismo, pero podemos apartarnos del sistema e irnos a un templo en el Tibet. No podemos ser millonarios de un día para el otro, pero podemos pisar gente, ganar "amigos" para perder otros pisando gente, generamos discursos demagogos comprando gente, para luego pisar nuestros discursos demagogos, confundir a la gente pisada y ganar "amigos" que nos van a comprar poder, que nos va a traer dinero evadiendo al fisco, lo que nos va a permitir hacernos ricos de a poco mientras pisamos a gente más cercana para que cuando seamos millonarios nuestros verdaderos antiguos amigos nos llamen para renovar la amistad con el dinero y algún puesto laboral lejano a su profesión y, de este modo, cumplir nuestro objetivo principal: recuperar a nuestros amigos en la cúspide del poder. (Nota importante: éste último ítem sólo puede ejecutarse dentro del chiquero político)

viernes, 13 de agosto de 2010

Nerhoma III

"El tiempo pasa más lento cuando uno espera
la respuesta a ninguna pregunta."


Dedicada para los que plantean que el tiempo corre muy rápido. Ya tienen un método para frenarlo. Y dedicada para los que esperamos una respuesta, sin haber preguntado.

miércoles, 4 de agosto de 2010

Carta al Inconciente

Mi estimado Inconciente:

Quería comunicarle amablemente, si no era mucha molestia, que deje de torturarme mientras mi cuerpo reposa por la noche. Ya he lidiado bastante con el punto de capitón y escapes sutiles de su modo de operar, por lo cual he sido objeto de burla y alguna bofetada también, pero he logrado mantenerlo anestesiado y le he ganado un par de batallas, debe reconocerlo. Por lo tanto, le pido que no me ponga en situaciones que anhelo profundamente (sobretodo en cuestiones de piel) de las que voy a despertar añorando un contexto lejano a corto plazo, para volver a pestañear y soñar con uno más cercano a largo plazo. Ya me ha demostrado en diversas ocasiones las dificultades que tengo que afrontar, y le aseguro que me las he enfrentado con la frente en alto, pero a veces dejan de depender de mi conciencia, de mis acciones, de su inconciencia, de sus fugaces brotes a la luz. Quisiera retomar los tópicos en dónde saltaba de un acantilado con un pañal en lugar de un paracaídas, donde visitaba París que se encontraba en el fondo de mi casa, donde tocaba un arpa mientras se prendía fuego el sistema capitalista, donde corría por la sábana desnudo mientras perseguía a un leopardo que me había afanado un espantasuegras, donde los sueños eran simplemente sueños, y no un boceto de lo verosímil. No hay necesidad de mostrarme aquello que no es, de hacermelo sentir, para luego arrebatármelo en el amanecer. Esto es una simple sugerencia, una advertencia. La próxima será una carta documento e iniciaré acciones legales. Y si eso no es suficiente, habrá represión.

Atte. La Conciencia

viernes, 30 de julio de 2010

El Templo de Nerhoma


Este es el Templo de Nerhoma en las montañas del Tibet. Actualmente se encuentra en construcción (la foto puede diferir del producto). En el sendero perpendicular para acceder se puede vislumbrar el cartel de bienvenida y su traducción:

"Bienvenidos a la luz. Aquellos discípulos que puedan adaptarse a la denigración y la bardeada del Maestro, serán aceptados. Aquellos discípulos que ayuden al Maestro a bardear y denigrar a los otros discípulos, serán aceptados. Personas moralmente correctas, abstenerse. Venid hacia la montaña, pues no vamos a ir hasta allá ni en pedo, ya encontramos un terreno a bajo precio cómo para andar moviendo todo y es un quilombo viste..."

jueves, 29 de julio de 2010

Las Recetas del Chef Orro II

Luego de un tour por la Mesopotamia, Burkina Faso, Cali y un período sabático en Devoto y Guantánamo; vuelve el Chef más codiciado por excéntricos culinarios y homicidas gastronómicos.

Voy a propiciarles la receta más efectiva para obtener una cena deliciosa con poco esfuerzo. Los materiales e ingredientes a utilizar son:


· Un amigo/familiar/conocido neurótico-obsesivo-compulsivo que tenga una empleada doméstica.


· Mmm.. sólo eso.

Nos excusamos de algún modo para introducirnos en la casa del sujeto en cuestión. Una vez adentro, ponemos en acción los siguientes ítems:


· Corremos la alfombra de bienvenida unos 5 cm a la izquierda.


· Cambiamos el lugar de la llave de la puerta de entrada, por el de la llave del garage que se encuentra a 26 mm de diferencia.


· Nos inmiscuimos sutilmente en la habitación del individuo para mezclar algunas prendas de ropa interior con las remeras. Luego desacomodamos su calzado unos 14 grados de su posición original.


Lo más probable es que luego de ejecutar el tercer item, el sujeto entre en un colapso nervioso o en el peor de los casos, muerte... por colapso nervioso. De no ser así, seguramente acudirá en busca de ayuda para apaciguar la cólera latente o buscar alguien en quien descargar la ira en pleno clímax. Sólo hay que evitar obstruir el camino, para luego ver cómo se desorbita al percatarse que la llave de entrada no se encuentra en el lugar correspondiente y la alfombra de bienvenida no está en escuadra perfecta con la puerta.

Una vez finalizado el brote, le pedimos a la empleada doméstica que nos ayude a traer el cuerpo en la vereda que yace desamayado a causa del arrebato contra un poste de luz, y aprovechamos para decirle que nos quedaremos hasta la cena para cuidar a nuestro querido amigo hasta que recobre la conciencia; para ello le pedimos que nos prepare una rica comida.

PD: Si llegamos a la casa y nos abre la puerta el sujeto neurótico-obsesivo-compulsivo, en lugar de la empleada doméstica; lo único que tenemos que hacer es indicarle que la alfombra está fuera de escuadra. Y voilá, a disfrutar.
Si queremos asesinar al sujeto sólo le pateamos la alfombra de bienvenida bien lejos.

Saludos desde el pabellón 14

Gustav Duv Orro

jueves, 22 de julio de 2010

Dedicatoria II

Nerhoma está on fire, esta vez para el aniversario del muchacho con los arbustos nacientes entre los pómulos y las orejas.

"Las cosas no aparecen cuando las buscamos. Las cosas no aparecen 
cuando las dejamos de buscar. Las cosas aparecen cuando 
no recordamos para qué las necesitábamos, 
lo cual crea una paradoja existencial 
en el momento de su aparición."

martes, 20 de julio de 2010

La Disciplina del Rom, Per Se


El juego de palabras del título no debe tomarse con liviandad. Puedo decir con temple que un porcentaje de la población humana esta particionado para la gente con una destreza impecable en la habilidad de romperse. Es más fácil pronunciar esto, cuando nos hemos roto una nalga pateando una circunferencia sin destino. Y no estamos hablando de la suspicaz metáfora en la cual reemplazamos el "Nos ganaron por diez goles de diferencia" por la premisa redundante que se estanca en "Nos rompieron el or...". No, acá no hay ninguna figura retórica. Esto es literal. Uno se puede romper una nalga en su interior sin necesidad de incurrir en metáforas linguísticas. La novedad, sorpresa, arrebato -como quiera llamársele- está en la posibilidad del relato de la lesión. ¿Cómo formularlo para que no tenga doble sentido en primera instancia? Yendo un poco más lejos, cómo explicar al masajista/kinesiólogo/proctólogo/zapatero? (siempre hubo una relación inherente a una frase que mi madre me ha dicho desde chico "Te voy a enterrar el zapato en el orto que te lo va a tener que sacar el proctólogo"). En fin, cómo explicar que la zona a tratar es delicada porque uno conserva un poco de su heterosexualidad por más que la gente le diga lo opuesto sólo por vestirse alguna que otra vez de travesti, doblar las muñecas cuando habla, tener algún desliz esporádico del inconciente catalogado como punto de capitón (por ejemplo "me gusta el rabo con peluca" que se escapa sin querer entre los labios); estos ítems son únicamente un estereotipo del sujeto que está a punto de comprar una franquicia en la sucursal más grande de Criollitas. Y si la hipérbole no alcanza, lo lamento, pero que quede claro que cualquier tipo de chiste queda relegado en el casillero de lo trivial y los lugares comunes. Si alguien va tener la osadía de emitir una gastada en virtud de esta desgracia, que sea muy innovadora. No quiero ni poner en la mesa la posibilidad de que siga dirigiéndome al masajista solamente por una cuota de placer en la zona dañada.

PD: No es Nícolas el de la imagen del trasero.

Dedicatoria

Por ser el cumpleaños de un licenciado con exceso de arbustos en el labio superior, va dedicada esta célebre frase del nuevo profeta, Nerhoma:

"Si querés romanticismo, comprate una máquina del tiempo
 y andá a visitarlo a Baudelaire..."

martes, 20 de abril de 2010

El Malestar en la Sutura

Uno no puede evitar indignarse bastante seguido por los tópicos que medios masivos inyectan habitualmente en la conciencia colectiva disparando emergencias fugaces o repitiendo discursos gastados. Pero en determinado punto, me resulta degradante la escasa amplitud verbal de los profesionales de los medios. No voy a inmiscuirme en temas de ortografía en los zócalos de los noticieros, porque todos sabemos que a la hora de tipear una cita bajo presión, se nos obstruye la carótida, sobre todo si tenemos doce años como la mayoría de los operadores que tipean esas citas. Sabiendo que toda la puesta en escena de un noticiero está comunicando algo, también lo hace el logo del programa, su tipografia, su decorado, susú pecoraro, su estilo y sus pseudo-periodistas. Ahora bien, mínimamente, hay que señalar que si estos profesionales no tienen ni la menor idea de lo que están hablando, deberían informarse, organizar rifas, o trabajar en un circo (que al fin y al cabo es lo mismo). Si no tienen más de diez adjetivos en el hipotálamo, no deberían rebosarse de frases trilladas y banales de sentido común; un mínimo de aporte intelectual no es menospreciado en los medios. Si no tienen preguntas que hacer, ¿entonces cómo se preguntaron que debían hacer de su vida?, por favor, no interroguen estupideces matinales porque yo puedo ser un autómata que hasta que almuerza no es capaz de hacer otra cosa que seguir una rutina; pero soy un autómata físico, no pensante. Usted señor periodista deportivo o de farándula devenido periodista general, hable con propiedad. Busque algunos bodoques de hojas con tapas duras, esas cosas que se llaman libros (y no me diga que lee a Coelho, Bucay, Majul o Ari Paluch porque eso es literatura de fantasía redundante del negocio capitalista, te vendemos cosas baratas para que las compres bien caras). Usted señora que estuvo en el extranjero y volvió para asumir el rol de periodista en algún medio masivo: piense antes de preguntar, si el entrevistado le acaba de decir hace dos minutos que su automóvil era azul, no le pregunte cada treinta segundos cuál es el color de su automóvil sólo porque un robot con auriculares le dice del otro lado de cámara que estire la nota. "Señores", ya sabemos que cada medio tiene un estilo periodístico y una bajada de línea predeterminada, no van a ejercer periodismo independiente, por más que el rótulo así lo diga. Pero sólo se pide un ápice de cordura en el malestar general. Son los que llevan la bandera de la comunicación, y les aseguro que está bastante sucia y sin muchas ganas de flamear. Ni siquiera se intenta fomentar una revolución de medios, ni un octubre semiológico, ni entender a Heidegger, ni un boicot en la línea de montaje, ni orinar caminando sin salpicarse y ni siquiera un palo en la rueda de la bicicleta mediática. Si tienen la molestia en la cicatriz, porque cuando entraron a un medio por primera vez les clavaron el bolígrafo en la yugular y les dijeron "vas a escribir lo que nosotros queremos que escribas", o bien, se los dieron a entender paulatinamente con un teclado compuesto de teclas abrasivas que borra de a poco las huellas digitales para unirlos en una masa amorfa de ideología simplista y vocabulario medieval; entonces el problema está en la elección del lugar de trabajo. Si no supura o no hay cicatriz, ni se molesten en entender de lo que se habla. Pero si lo hacen, tómense un momento para pensar qué están comunicando con determinadas palabras. Las palabras las instalan ustedes en el imaginario, y su repertorio léxico, en este momento, debe ser equivalente a la misma cantidad de palabras que hay en la contratapa de "El Hombre Unidimensional", cuando debería equiparar a la mitad de su contenido.

viernes, 9 de abril de 2010

Filosofía Capitalista: Los Diez Mandamientos

1 · Amarás el dinero sobre todas las cosas.
2 · No tomarás empleados en vano. Explotarás los que tengas al máximo.
3 · Santificarás la plusvalía.
4 · Honrarás a tu empresa, a tu banco, a tu cuenta, a tus acciones, a tu auto, a tu televisión satelital, a tu aseguradora, a tu abogado, a tu contador, a tu padre y a tu madre (en ese orden de relevancia).
5 · Repite punto 1.
6 · No matarás. Excepto que tu empresa se dedique a eso.
7 · Repite punto 2. Y agrega: echarás algunos empleados argumentando "reestructuración".
8 · No invertirás en negocios de baja rentabilidad.
9 · No robarás... en forma directa. Siempre a través de negocios sucios, plusvalor, canjes por publicidad, explotación, gestiones dudosas, lavado de dinero, contrato de pasantes y personal temporal.
10 · Repite punto 6. Exceptuando delegados de gremios y sindicatos.
11 · No tendrás ética.
12 · Buscarás la definición de la palabra "ética" en el diccionario.
13 · Olvidarás la definición de la palabra "ética".
14 · Anula punto 6. Someterás a tus empleados a tácticas y acciones que les provocarán stress y paulatinamente los colocará en una lenta agonía que terminará en un letargo de la plebe.
15 · Te comunicarás con tu contador para saber cuantos números son diez.

Alabado sea el patrón.

jueves, 1 de abril de 2010

La Metáfora del Peón

En determinadas ocasiones solemos interpretar roles que conforman un universo de metáforas y símbolos pertinentes a un lenguaje particular y dentro del mismo marco de reconocimiento social. Últimamente, he reciclado un tipo de representación y metáfora de índole bélica/lúdica, para asentarla en la práctica cotidiana: el peón en el ajedrez. Ese tipo de actitud o acción que -por obligación moral o civil, por reglas, por carácter o por sentimientos- nos hemos topado en virtud de dar un paso adelante, de poner el pecho, de mostrar firmeza aunque el contexto no sea el indicado, de ser el peón en el ajedrez; aquel rol que sabemos que va a ser sacrificado en las primeras jugadas, el soldado de infantería que va a conformar la primer oleada y va a recibir los primeros silbidos del plomo en tierras foráneas. Pero cansado de las hipérboles modernas, voy a utilizar el recreacionismo para contemplar esta acción lejos de la técnica actual.
Si ocupáramos el rol de Homo Erectus, probablemente hubiéramos sido los primeros en ir y tocar aquel líquido espeso de tonos colorados y amarillos, para contemplar por vez primera el ardor de lo que luego el hombre moderno denominaría como magma. Quizás el Neolítico hubiera sido el período que nos observó cuando intentamos recrear ese elemento tan poderoso, a través de la fricción entre ramas, entre caparazones de tortuga, entre los colmillos de un tigre dientes de sable; hasta que viene el bufón de la aldea y se tropieza con nuestro cuerpo que yace en el matorral desangrándose por culpa de un tigre dientes de sable, y al caer, sin querer, provoca un contacto entre dos piedras y genera la ignición de aquella mágica y colorida llama. Mientras uno observa agonizando cómo el gil de la aldea se gana a todas las mujeres de la aldea por su útil estúpidez.
Tiempos remotos de mitologías nórdicas, y a nosotros se nos ocurre declararle nuestro amor a la esposa de Thor, pensando que por una mirada casual que nos envió, podría llegar a escapar de su riqueza y gloria, para huir juntos lejos (650 metros de su castillo aproximadamente, el recorrido máximo que puede hacer en un día un burro que nos robamos creyendo que era el caballo de un soldado). Huir hacia un cerro donde posar nuestras esperanzas y paz, estableciendo un puesto de artesanías, tejidos y dispositivos cannábicos. Claro, olvidamos tener en cuenta que la señora de Thor no tiene muchas intenciones de salir de su ciudad, pero su marido tiene muchas ganas de aplicar un nuevo movimiento de batalla justo contra nuestro pecho. De ahí en más, agonizaremos hasta que nos quedemos sin miembros (cada vez que se necesita de la lluvia, nos sacrifican una parte de nuestro cuerpo para ofrecerla a un dios que, de vez en cuando, riega las plantas en sus nubes).
Quizás en épocas de comercio de ultramar, interpretamos a un marinero que vislumbra una tierra desconocida a lo lejos; lo exótico está a unos pocos metros y debemos desembarcar para investigar la zona. Somos los primeros en pisar América. Somos los primeros en ser atravesados por 14 lanzas de una tribu de nativos temerosos. Nuestro cadáver será ejemplo para el resto de los colonizadores que osen dominar un territorio poblado de muchachos con gran puntería.
En tiempos contemporáneos, seremos testigos del accionar de un pelotón de fusilamiento, pero para ajustar la mira de los carabineros, el general nos comunicará sabias palabras:
General Oppresseur: Soldado, necesito de su colaboración para ajustar la mira de los fusiladores, párese delante de aquel muro antes de que se paren los verdaderos criminales.
Teniente: Pero mi general, no soy un recluta, soy un teniente...
General Oppresseur: Pero, ¿quién es usted para contradecirme?
Teniente: Teniente González, señor.
General Oppresseur: Mmm, ¡Con ese apellido usted no pudo haber ascendido a teniente, ahora no sólo va a ajustar la mira de las carabinas, sino que va a ser fusilado por embaucador!
Teniente: ¡Pero señor, he atravesado demasiadas eras para llegar a Teniente Primero! ¡La edad de piedra!, ¡La de unos dioses paganos y sanguinarios!, ¡Arriba de un barco con un capitán que tenía un corte de pelo tazita super maricón! ¡Y al fin llegué hasta aquí!
General Oppresseur: ¡Soldados! ¡Apunten!...
Teniente: ¿Puedo aunque sea fumarme una pipa que diseñé cuando estuve solo en un cerro? Como último deseo...
General Oppresseur: ¡No! ¡Fuego!
Siempre que optamos por ejecutar el movimiento de dar el paso adelante, de poner la cabeza para ver si la guillotina está afilada, de probar si la trampa para osos funciona con nuestra pierna; no se nos reconoce el valor de la acción hasta saber si el resultado es negativo o positivo. Ya sea que nos movemos por cuestión del azar, por decisión propia, por obligación, por amor, por estupidez, estamos atados a las condiciones que nos impone la opinión y el reconocimiento social en virtud del resultado de nuestra acción. Por estos motivos, se reclama más reconocimiento para el peón, para su jugada, para su rol; él es tan importante cómo el juego en sí mismo, más allá de que ganemos en el juego o perdamos.

lunes, 29 de marzo de 2010

El Efecto Mariposa. Parte II

Hace un año, aparecieron los primeros efectos del aleteo de la mariposa. Podemos argumentar que los efectos son relativos en función del tiempo, pero eso es también relativo. No intento confundir, pero me gusta confundir relativizando supuestos. El simple acto de un llamado telefónico puede influir, sin que nos demos cuenta, en una cantidad de secuelas impensadas: un conductor que atiende el teléfono, una maniobra brusca por evitar a un transeúnte cruzando en medio de la avenida, un insulto a un conductor que habla por teléfono mientras maneja, un cambio de humor mientras caminamos por la urbe debido a la negligencia de un conductor, una recepcionista que está al borde de los nervios y un cliente que llega insultando desde la calle que no hace otra cosa más que arrebatar la poca paciencia de la recepcionista, para terminar generando una orgía de insultos bajo el lente de una cámara que pronto tendrá sus miles de visitantes en youtube y, de este modo, provocar una leve sonrisa en un cibernauta y así comenzar un nuevo ciclo que tendrá su polo emotivo invertido.
Pero también se puede tornar más excéntrico un aleteo. Por ejemplo: un ciclista que recibe un mensaje de texto descuidando que un perro callejero pone su atención en él cuando ha detenido su marcha, un perro que comienza a ladrar persiguiendo al ciclista, un ciclista que comienza a huir y pierde el celular en una boca de tormenta, un mensaje que nunca se responde, una persona que espera confirmación vía sms de un ciclista, pero se impacienta y llama a éste; en lugar de él, atiende un "maestro" de las cloacas que se autodenomina como "splinter", recibe la llamada de la otra persona impaciente que comienza a los insultos al no saber que sucede con el ciclista, un maestro que cambia su humor súbitamente debido a la mala educación de la persona, unos cuatro muchachos con caparazón que se acaban de levantar y tienen que soportar el duro entrenamiento de un maestro enojado sin motivo aparente, un ciclista que denuncia en la comisaria que una rata de las alcantarillas y cuatro sujetos verdes le devolvieron su celular con un chip que no correspondía, un ciclista que pasa sus horas viendo el paisaje de edificios y 14 minutos diarios de luz solar dentro de un neuropsiquiátrico.
Nunca se sabe exactamente cuantas secuelas podemos causar con una mínima decisión. Cuántas cosas podemos cambiar con un simple movimiento o con unas pocas palabras. No se pueden medir las consecuencias de nuestras decisiones. Pueden anticiparse hasta cierto punto, y hasta donde afectan en determinadas costumbres o hábitos, o cómo pueden afectar a determinadas personas y sus actitudes. En ocasiones, sin embargo, cuando tomamos una gran decisión, pareciera que nada cambia; que el mundo sigue su trayectoria normal sin la más mínima transformación respecto de nuestra elección. De nuevo a nuestro punto inicial de la relatividad: a veces cambiamos las cosas sin darnos cuenta, a veces no cambiamos nada intentándolo, pero siempre termina dependiendo del lugar que ocupamos, de nuestra capacidad de visión y su alcance; y de las oportunidades que aprovechamos, las que dejamos de lado, o las que ni siquiera percibimos.

viernes, 19 de marzo de 2010

El Vengador del Pasafactura

A continuación se establecerán una serie de ítems para la asistencia del vengador del pasafacturas:

· Para los que nos recuerdan a cada rato que les debemos dinero: rentamos un local de suministros santificadores a nombre del pasafactura (buscamos que linde con un hipermegatone o con algún hipermeganegocio de variedad temáticas de gran valor para el goce consumista), hacemos un gran boquete y denunciamos a la víctima. Vuelve lo retro, vuelven los boquetes.

· Para el que nos recuerda a cada rato lo divertido que es pasar el rato con él y qué fiasco sería nuestra vida sin su presencia: lo invitamos a una salida de joda nocturna vistiendo una remera con un emblema antisemita en su espalda de modo que no lo perciba, y lo llevamos a un boliche gay de fisicoculturistas judíos donde la pasaremos bomba. Recordar llevar cámara de foto.

· Para el que no se acuerda del año en que vive, ni de nuestro cumpleaños, ni de su cumpleaños y se tiene que bajar el pantalón para recordar si tiene que ponerla o la tienen que empomar, pero que se acuerda del minúsculo detalle que nos hizo un favor en el año 1997, a las 16 hs un día de lluvia cuando vestíamos una chomba blanca con la insignia de un cocodrilo trucho: compramos una memoria DDR-20 a.C (memorias cibernéticas rústicas en forma de piedra, invirtiendo la evolución tecnológica, vendrían a ser como memorias pero sin la parte tecnológica quedando en su lugar, un pedazo de roca). Luego, citando frase contemporánea a tal período -"el que esté libre de pecado, que arroje la primera piedra"-, lanzamos objeto contundente cual cascote en catapulta de guerra medieval, argumentando más tarde que no comprendimos la frase citada.

· Para el que nos recuerda a cada instante lo miserable que es el mundo y nos pone trabas de lo más sofisticadas e imprevistas para poder progresar: si sólo pudiera hacer tangible a Dios...

El Gran Teorema Reflexivo

"La dialéctica no se da mediante un contrato social preestablecido, sino que se va acomodando según las necesidades de las partes. ¿Qué sucede cuando una de las partes no tiene voz propia? En algún momento esa voz toma determinado tipo de forma, ya sea mediante algunos atributos físicos de índole catártico, o a través de un episodio interno de caos esquizofrénico. ¿Y qué más lamentable que la inexistencia siquiera del acuerdo de antemano; o más bien, el acuerdo se ha corrompido debido a las circunstancias del pacto con la modernidad? Cuando una de las partes ha generado su propia amnesia original para sudar un frío industrial capaz de organizar la mejor de las peores consecuencias; ahí es cuando la relación se torna intolerable, una de las partes ha sucumbido ante la inestabilidad de la dialéctica y puede producir las acciones más siniestras para la sensibilidad humana. Por eso, en 150 años de aceleración de teoremas corrosivos, finalmente podemos darnos el lujo de ver la venganza en vivo y en directo, el momento de caos interno y el brote psicótico de nuestro único hospedaje en la vida."

Parafraseando bigotis: "Si el tiempo es lineal, ¿como fuimos capaces de desviarnos por la tangente?"


martes, 16 de marzo de 2010

Maniobras persuasivas

Vivimos en un gran juego de batallas. Y ya nos hemos distraído tanto en las victorias y las derrotas que perdimos de vista el juego en sí mismo. Y no estoy hablando de triunfos como: ganar un premio, reventar un casino, dar una vuelta olímpica, dar una triple mortal sin romperse la cervical, hallar un tesoro, hallar un cadáver de velociraptor en pleno coito con un hervíboro sadomasoquista, componer una canción relativamente mediocre o encontrar la media naranja (el mito de la modernidad en el cual somos compatibles con otra persona relegando nuestras verdaderos fetiches y tabúes para asimilarlos en una relación pseudo-matrimonial con resquicios de autocensura). Lo mismo va para la derrota; no hay que apuntar a los grandes fracasos que nos decoran la vida de lágrimas. Las lágrimas ya son una deshidratación, por ende una pérdida de líquidos. Otra batalla perdida. La locura está en los detalles, y es allí dónde verdaderamente perdemos la coherencia y la lógica de nuestros enunciados. El talento para complicar nuestra existencia es propia del raciocinio moderno, hay tantos detalles para abrumar nuestra cordura, que le damos la suficiente importancia como para que verdaderamente conviertan una calesita de ideas en un Chernobyl de diversiones autodestructivas. Pero no basta sólo eso, tenemos que ser tan incoloros de presencia temporal que también debemos contagiar esto en el resto de la humanidad. ¿Cómo se realiza esto? Fácilmente: mentiras, supuestos, engaños, suposiciones y amagues (todo aquello que también es condimento en la dialéctica del fútbol).
Voy a pasar a definir tres de estas tácticas:

·Mentira: su uso es frecuente en la sociedad. Se utiliza tanto en el ámbito doméstico, como en el laboral o social. Existe en su plenitud salvadora, casi sin consecuencias, como por ejemplo: "¡Pero si te queda bien!", "Está riquisimo, pero no tengo hambre", "Ya estaba así cuando llegué ", "Noo, justo este finde no puedo.. se casa mi.. consuegra". Convenciones sociales aceptadas para evitar herir a la gente. Oscila entre el filo de la verdad y la mentira, pero lo suficiente como para hacernos dudar. Surgen de la improvisación, ya que no requiere un tiempo de estrategia y demanda una respuesta inmediata. Por otro lado, tenemos la mentira planeada, aquella que sabemos o intuimos las consecuencias. Existen la mentira planeada en escasos segundos (esta es aquella en la cual nos tomamos un momento para plantearnos internamente la mejor respuesta, habitualmente desplegada con un "¿que? no te escuché" estratégico que nos otorga unos formidables segundos para no meter la pata. Y existe la mentira planeada con tiempo, aquella que involucra otros personajes, a veces incluye cómplices y es un engranaje complejo de mentiras por doquier que conforma una red impactante de detalles innecesarios en la búsqueda de la verdad desorientada de ser verdad por el hecho de permanecer fundamentada en cada rincón.

Supuestos: son los enemigos del presente. Conforman un efecto dominó que altera y provoca caos tanto en nuestro interior, como en nuestro alrededor. Un mal comienzo de un supuesto, puede terminar desde una pelea callejera por un entredicho mal interpretado, hasta una conspiración gubernamental por una influencia estadística basada en un supuesto inconmensurable, derivando en guerra civil, nacionalismo ascendente, revolución o manifestación hermafrodita en pro del aborto.

Amague:  no requiere ningún tipo de esfuerzo del provocador. En la mentira, uno establece una mínima labor para que las cosas funcionen bien, o del modo en que venían funcionando, es decir: muestra preocupación. Esta táctica es la indiferencia, la evasión; si alguien aplica esta técnica contra uno, es porque no entra en el conjunto de sus pares de preocupación, no establece la suficiente confianza o está entreverado entre la mentira y una verdad peligrosa. Esto nos lleva a la siguiente pregunta: ¿Dulce mentira o Cruel verdad? Creo que ante cada pregunta que requiera una respuesta aplicada, deberíamos tener esta opción: todos queremos la cruda verdad pero nunca queremos escucharla. Todos pedimos por la verdad, pero no estamos preparados para aceptarla. Entonces la mejor respuesta es: queremos la cruda verdad disfrazada de dulce mentira; de este modo el mundo sigue siendo nuestra propia verdad y no la imperante madrugada de una verdad inesperada. Es hora de dejar el rivotril y amagarle a la técnica del amague.

miércoles, 6 de enero de 2010

La Bisagra Moderna

Por alguna extraña razón atribuible a un Dios todopoderoso o alguna razón científica atribuible a una organización de laboratorios todopoderosos, quedamos reducidos a una suerte de recuerdos residuales, pequeñas o grandes fracturas y baches de memoria gracias al fenómeno tecnológico que invade los sentidos como una especie de acupuntura danzante en una orgía de cables de fibra óptica. Para equilibrar esto, se proponen ciertas soluciones de medicina tanto de derecha como de izquierda (si se puede encasillar de alguna manera en general a los grandes laboratorios y por otro lado, a su alternativa homeopática). Este pseudo Dios maquiavélico con adsl, me va empujando todos los recuerdos tangibles y sustituyéndolos por frases de Homero Simpson y chácharas incongruentes entre un diputado de la nación enfrentado con una señora que grita porque sabe que las drogas son malas pero todavía no sabe bien por qué. De pronto me encuentro en una pequeña cajita oriunda de un mundo alienado del tacto, buscando a quién acertarle un golpe en la quijada sin quedar preso porque el soporte técnico de la tv por cable está fuera de la zona de reparación y demoraría unos lustros y dos horas en llegar. Me gustaría saber por qué el tiempo es mi enemigo cuando tengo tiempo para sonreír, y por qué tengo tiempo para quejarme cuando podría estar sonriendo. Mi primer respuesta, es la hipótesis esencial de este párrafo: dentro de diez minutos me voy a olvidar de esto. Por suerte, hay gente del otro lado del teléfono denominada como "soporte técnico", que no tiene nada que ver con nuestro paradigma denigrante de la vida, pero que hace las veces de bolsa de arena. "Señor, no me anda la interné/tv satelital/gas/luz/cámara de fotos/acción/receta de calabaza al escabeche/servicio telefónico, voy a mandarles carta documento/cambiar de compañía/llamar a defensa del consumidor/inmolarme en la terraza de su sucursal con un parapente cargado de nitroglicerina, excepto que ustedes se dignen a prestarme un mejor servicio/compensarlo con dos meses de servicio gratis/darme todo su dinero/concederme servicio gratuito de por vida/presentarme a la operadora de voz sensual/conseguirme trabajo o alguna changa/conseguirme un contrabajo o alguna tanga/devolverme el parapente con la nitroglicerina que no se activó por fallas en la ignición. Gracias"